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El fotógrafo Suizo Franco Banfi, en los pequeños pantanos de Mazo Grosso, Brasil. Hogar de la temida e intimidante Anaconda gigante, para un encuentro cercano con uno de los depredadores más impactantes en el planeta. Equipado con su cámara y bajo las aguas turbias. Banfi se propuso capturar fotografías únicas y detalladas de esta serpiente colosal que puede superar los 8 metros de longitud y pesar más de 200 kilos.

Este asombroso desafío no solo implicó un dominio técnico extraordinario, sino también una enorme preparación para garantizar la seguridad frente a un animal que, aunque rara vez ataca a los humanos, es un experto cazador en su entorno natural. Las imágenes ofrecen una visión sin precedentes de la majestuosidad de esta legendaria especie.